La demanda inmobiliaria en las llamadas zonas prime de Barcelona no desfallece. Es más: algún experto inmobiliario la ha calificado de “exagerada”. Entre esas zonas prime del municipio barcelonés en el que la demanda de fincas de alto standing no disminuye encontramos el Eixample, Ciutat Vella, Diagonal Mar y, por supuesto, la zona alta de Barcelona (Sarrià, Pedralbes…). Esta demanda incesante ha empujado el precio de los inmuebles de alto standing al alza y hará que, según las previsiones, se incremente en un 12% en dichas zonas prime.
Este incremento del precio de los pisos y casas de alto standing seguirá la tendencia ya registrada durante este último año en el mercado inmobiliario de Barcelona. Al valorar este aumento de precio hay que tener presente un factor que, endémico en la capital catalana, siempre empuja los precios al alza. Ese factor es la falta de suelo disponible.
Las características de Barcelona convierten el suelo construible en un bien escaso y, por tanto, caro. De hecho, diferentes estadísticas apuntan a que, durante 2015, fue en Barcelona donde, más allá del mercado de alto standing, más subió el precio de los pisos. 2.217 euros el metro cuadrado fue el precio medio con que cerró el 2015 en Barcelona. Este precio es significativamente superior al precio registrado en Madrid, que fue de 1.697 euros por metro cuadrado. Esta diferencia no hace sino plasmar una diferencia que se va haciendo estructural entre Madrid y Barcelona y que tiene su explicación fundamental en las características geográficas y estructurales de cada una de las ciudades. Barcelona no dispone, como dispone Madrid, de zonas de crecimiento periféricas dentro de los límites del municipio que ayudan a bajar la media de los precios.
Los promotores inmobiliarios, buscando suelos de precio más asequible y mayores posibilidades de negocio, han vuelto a posar su mirada en municipios cercanos a Barcelona y que en su momento ya tuvieron un papel inmobiliario destacado. Entre los municipios cercanos a Barcelona que han atraído el interés de los promotores inmobiliarios de viviendas de alto standing podemos encontrar Sitges, Sant Cugat, Alella o Sant Just Desvern.
La crisis del sector, esa enfermedad de larga duración que sobrevino tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, ha dejado sin embargo un efecto secundario que, de momento, parece caracterizar el funcionamiento del sector: la cautela. Los promotores inmobiliarios de inmuebles de alto standing esperan en la actualidad a que se haya vendido al menos la mitad de una promoción para comenzar a construir la misma.
Dando por sentado ese incremento de la demanda toca preguntarse quiénes serán los compradores de todas estas nuevas promociones de alto standing. Las previsiones parecen indicar que la respuesta a esta pregunta no hará variar demasiado los porcentajes actuales que indican que el 70 % de las compras de inmuebles de alto standing las realizan extranjeros. Entre los capitales españoles que componen el restante 30% hay que destacar los de aquellas personas que, disponiendo de dinero, han esperado a la estabilización del mercado para realizar una inversión que, en el peor de los casos, no se revalorizará de golpe pero que en caso alguno se devaluará.
Según los estudios realizados, estas personas disponen de un presupuesto de entre 500.000 y un millón de euros y buscan una propiedad inmobiliaria de alto standing destinada a uso propio. El hecho de que la inmensa mayoría de estos inmuebles de alto standing demandados en el mercado inmobiliario barcelonés vayan destinados a uso propio ha influido en que las exigencias de los compradores de pisos y casas de lujo se hayan vuelto más sofisticados. Los compradores de viviendas de alto standing, por decirlo de algún modo, se han vuelto más exigentes. Esa mayor exigencia se concreta cuando estos compradores solicitan mejores servicios comunitarios. Puede ser vigilancia, pueden ser salas de reunión, puede ser una piscina o puede, incluso, ser un gimnasio. Éstas son las principales demandas que los potenciales compradores de viviendas de alto standing solicitan y éstas las que harán que, en el mercado inmobiliario de alto standing, triunfen aquellos promotores que, más allá de la ubicación de las viviendas en sí, cuiden esos detalles. Otro de esos detalles que los compradores de viviendas de alto standing valorarán en los próximos tiempos será el de priorizar la compra de aquellos inmuebles en cuyo diseño y construcción hayan participado arquitectos de un cierto renombre. Esta tendencia ya se ha empezado a constatar en los últimos tiempos y a ella dedicaremos un próximo post.