Es imposible hablar de arquitectura contemporánea sin citar el nombre de Zaha Hadid. Esta mujer, nacida en Irak hace 74 años y fallecida en 2016, es considerada una de las arquitectas más influyentes y revolucionarias del siglo XXI. Su trayectoria profesional no solo transformó el paisaje arquitectónico mundial, sino que también dejó un legado duradero que continúa inspirando a nuevas generaciones de diseñadores y arquitectos.

Fallecida en Marzo de 2016, queremos rendir homenaje a quien consiguió convertirse en una referencia absoluta de la arquitectura contemporánea.

En este post vamos a repasar su trayectoria vital, vamos a analizar cuáles son las características distintivas de su arquitectura, haremos un breve listado de sus obras más emblemáticas y analizaremos de qué forma ha influido su estilo en la arquitectura contemporánea.

Os invitamos a conocer el importante legado de esta arquitecta iraquí.

Zaha Hadid

Vida y legado de Zaha Hadid

Zaha Hadid nació el 31 de octubre de 1950 en Bagdad. Desde pequeña mostró un gran interés por las matemáticas y la geometría. Educada por monjas francesas, Hadid estudió matemáticas en Beirut. A la edad de 20 años, y debido a la llegada de Sadam Hussein al poder, Zaha y su familia tuvieron que marchar a Inglaterra. Londres se convirtió entonces en su lugar de residencia y el punto desde el que proyectarse hacia el mundo como una innovadora arquitecta.

En Londres estudió en la prestigiosa escuela de arquitectura AA de Bedford Square. Su licenciatura tuvo lugar en 1977. Tras ella, Zaha empezó a trabajar en el estudio del arquitecto holandés Rem Koolhaas. Empezaba para ella una lucha denodada por ser reconocida interiormente como lo que era: una gran arquitecta.

La arquitecta iraquí, que en múltiples entrevistas resaltó los esfuerzos que tuvo que hacer como mujer para abrirse paso y ser respetada en una profesión mayoritaria y tradicionalmente masculina, destacó en alguna ocasión que a favor de su arquitectura jugó un acontecimiento determinante en la historia de la arquitectura: la construcción del Guggenheim de Bilbao. Gehry, arquitecto que firmó el maravilloso proyecto arquitectónico bilbaíno, abrió la puerta a una serie de arquitectos que deseaban romper los límites físicos y formales de la arquitectura. Entre todos esos arquitectos se encontraba ella.

Para ser valorada como la gran arquitecta que era tuvo que luchar denodadamente contra injusticias tales como la de ganar concursos y ver después cómo le proyecto que finalmente se construía estaba firmado por otro arquitecto. Eso mismo fue lo que le sucedió con la Ópera de Cardiff, en Gales. Ella ganó el concurso, pero fue Norman Foster quien levantó el edificio. Una flagrante injusticia que la hizo sentirse sola. Sólo Richard Rogers, arquitecto británico de origen italiano y autor de obras como el parisino Centro George Pompidou o de algún edificio de la Terminal 4 del aeropuerto Adolfo Suárez-Barajas (Madrid), inició una protesta pública por el hecho.

La arquitecta iraquí, con un espíritu creativo imbatible, diseñó joyas, muebles, zapatos, bolsos, barcos, y, por encima de todo, se puso un objetivo entre ceja y ceja: “romper los límites de la arquitectura”. Para ello defendió la necesidad de convertir los edificios en paisaje. Para ello, afirmaba, había que repensar los límites físicos de las construcciones. Quizás fue ese planteamiento revolucionario el que hizo que muchos la consideraran, en sus inicios, no tanto una arquitecta sino una pensadora de la forma. Los dibujos de Zaha Hadid eran unos dibujos rompedores, casi utópicos. ¿Podían construirse aquellos edificios de apariencia expresionista? Ella iba a demostrar que sí. Y lo iba a demostrar de tal forma que iba a ser la primera mujer en recibir el prestigioso Premio Pritzker. Considerado el Nobel de la Arquitectura, Hadid fue premiada con él en 2004.

Además de su obra arquitectónica, la iraquí fue una educadora apasionada. Enseñó en varias instituciones de prestigio, incluidas la Universidad de Harvard y la Universidad de Yale, donde inspiró a miles de estudiantes a pensar de manera creativa y a desafiar los límites de lo posible. Su enfoque pedagógico se centró en fomentar la experimentación y la exploración, animando a los estudiantes a desarrollar su propia voz y estilo en el diseño.

Zaha Hadid falleció el 31 de marzo de 2016 en Miami, pero su legado perdura. Su influencia se siente en todo el mundo, desde museos y galerías hasta edificios comerciales y residenciales. Su capacidad para fusionar el arte, la tecnología y la arquitectura ha dejado una marca indeleble en la historia del diseño, y su nombre continuará siendo sinónimo de innovación y audacia.

En el siguiente apartado vamos a conocer con mayor detalle cuáles son las características de la arquitectura de Zaha Hadid.

Obra de Zaha Hadid

Una oda a las curvas y a las formas fluidas

Zaha Hadid fue, sin duda, una de las arquitectas más influyentes y reconocidas del siglo XXI. No en vano, dejó una huella indeleble en el mundo de la arquitectura contemporánea. Su trabajo se caracteriza por una búsqueda constante de nuevas formas, una exploración audaz de la geometría y una integración innovadora de tecnología. A lo largo de su carrera, desafió las convenciones arquitectónicas y promovió un enfoque que fusiona la escultura con el diseño arquitectónico.

Una de las características más sobresalientes de la arquitectura de Zaha Hadid es el uso de formas fluidas y dinámicas. A menudo, sus edificios parecen estar en movimiento, capturando una esencia de continuidad y transformación. Esta fluidez no solo se refleja en la estética de sus diseños, sino también en la funcionalidad de los espacios, que promueven una experiencia única para el usuario. La bagdadí decía que su objetivo era crear “espacios en los que la gente pueda moverse, en los que puedan interactuar”, lo que se traduce en un enfoque que prioriza el flujo y la experiencia del usuario en el entorno construido.

La geometría no convencional es otra característica clave de la obra de Hadid. Su estilo se aleja de las líneas rectas y las formas ortogonales tradicionales, optando en cambio por volúmenes complejos y curvas audaces. Este uso de la geometría avanzada le permitió crear estructuras que son tanto funcionales como visualmente impactantes. Proyectos emblemáticos como el Centro Acuático de Londres y el Museo de Arte Contemporáneo de Cincinnati son ejemplos perfectos de cómo esta mujer transformó la arquitectura en una forma de arte tridimensional, donde cada ángulo y cada línea cuentan una historia.

La tecnología también juega un papel crucial en la arquitectura de Zaha Hadid. Desde el diseño asistido por computadora (CAD) hasta la modelación de información de construcción (BIM), Hadid fue pionera en la utilización de herramientas tecnológicas que le permitieron realizar sus visiones complejas. Estas herramientas no solo facilitaron la creación de formas innovadoras, sino que también optimizaron los procesos de construcción, haciendo posible la materialización de ideas que antes se consideraban imposibles. Su enfoque vanguardista promovió un diálogo entre la arquitectura y la tecnología, estableciendo un nuevo estándar en la industria.

Otro aspecto distintivo del trabajo de esta estrella de la arquitectura es su capacidad para integrar sus edificaciones en el entorno circundante. A menudo, sus diseños dialogan con el paisaje, ya sea mediante la incorporación de elementos naturales o a través de una adaptación cuidadosa a las características del sitio. Este enfoque se puede observar en el Centro de Arte Contemporáneo de Guangzhou, donde la estructura fluye con el contexto urbano, creando un espacio que es tanto parte del paisaje como un hito arquitectónico.

Además, Hadid tenía un enfoque singular hacia la sostenibilidad. Aunque su estilo a menudo se asocia con lo ostentoso y lo futurista, también exploró maneras de hacer que sus edificaciones sean más sostenibles. Con la incorporación de tecnologías de eficiencia energética y la selección de materiales sostenibles, Hadid demostró que la innovación arquitectónica no está reñida con la responsabilidad ambiental.

Por último, la obra de Zaha Hadid se caracteriza por su provocación y su capacidad de desafiar las normas establecidas. Su arquitectura ha sido objeto de controversia y admiración, a menudo generando debates sobre el papel del arquitecto en la sociedad contemporánea. Hadid rompió barreras, no solo en términos de diseño, sino también en la percepción de la mujer en un campo predominantemente masculino. Su legado sigue inspirando a nuevas generaciones de arquitectos a explorar lo desconocido y a cuestionar los límites de lo posible.

Arquitectura de Zaha Hadid

Obras más emblemáticas de Zaha Hadid

El estilo audaz y vanguardista de Zaha Hadid rompió con las convenciones tradicionales, ofreciendo formas fluidas y estructuras innovadoras que desafiaban la gravedad. A lo largo de su carrera, Hadid recibió numerosos premios, incluido el prestigioso Premio Pritzker en 2004, convirtiéndose en la primera mujer en recibirlo. Entre las más emblemáticas obras de Zaha Hadid podemos destacar las siguientes:

  • Centro Acuático de Londres. Diseñado para los Juegos Olímpicos de 2012, este edificio destaca por su forma ondulante, que evoca el movimiento del agua. La estructura está compuesta por techos de gran amplitud y amplias ventanas que permiten la entrada de luz natural. Además, el diseño del centro se integra armoniosamente con el paisaje circundante, creando un espacio funcional y estéticamente atractivo para los amantes de los deportes acuáticos.
  • Museo MAXXI en Roma. El Museo Nacional de las Artes del Siglo XXI (MAXXI) en Roma es un testimonio del enfoque innovador de Hadid hacia el diseño museográfico. Inaugurado en 2010, el MAXXI presenta un exterior dinámico y un interior flexible que permite una constante reconfiguración de los espacios de exhibición. La obra está compuesta por una serie de volúmenes interconectados que guían a los visitantes a través de un recorrido único, mostrando la interacción entre el arte y la arquitectura.
  • Centro de Arte Contemporáneo Rosenthal en Cincinnati. Inaugurado en 2003, es otra de sus obras significativas. Este edificio se caracteriza por su diseño angular y audaz, que desafía las normas arquitectónicas convencionales. El interior del centro está diseñado para ofrecer una serie de espacios de exhibición que se adaptan a obras de arte contemporáneo, haciendo hincapié en la versatilidad y la modernidad del diseño de la arquitecta iraquí.
  • Biblioteca CMA en Ohio. La Biblioteca de Arte de Cleveland, conocida como CMA, es un ejemplo perfecto de cómo la arquitectura puede transformar la experiencia del usuario. Inaugurada en 2013, la biblioteca destaca por su estructura futurista y su enfoque en la sostenibilidad. El diseño incluye un espacio de lectura luminoso y abierto, así como áreas de exhibición que fomentan la interacción entre los visitantes y el arte. La combinación de funcionalidad y estética hace de esta biblioteca un lugar único para el aprendizaje y la apreciación del arte.
  • Estación de Bomberos en Vitra, Alemania. Construida en 1993, es una de las primeras obras de Zaha Hadid que captó la atención internacional. Esta estructura, que se caracteriza por su forma escultórica y su uso de materiales modernos, desafía la noción tradicional de lo que puede ser un edificio de servicio público. La estación no solo sirve como un espacio operativo para los bomberos, sino que también es un hito arquitectónico que refleja la visión vanguardista de la arquitecta bagdadí.
  • El Centro Cultural Heydar Aliyev en Bakú. Inaugurado en 2012, este edificio es una de las obras más ambiciosas y reconocibles de la arquitecta iraquí. Su diseño fluido y orgánico se destaca entre los edificios circundantes, creando un espacio que promueve la cultura y la diversidad. La estructura cuenta con un auditorio, espacios de exposición y áreas públicas, todo integrado en una forma que simboliza la apertura y el diálogo. Este centro se ha convertido en un símbolo de la modernización de Azerbaiyán y un legado del talento de esta inolvidable arquitecta.

En resumen: podemos afirmar que Zaha Hadid no solo transformó el paisaje arquitectónico de las ciudades en las que trabajó, sino que también rompió barreras en un campo históricamente dominado por hombres. Sus obras emblemáticas, caracterizadas por un diseño innovador y formas fluidas, continúan desafiando nuestras percepciones sobre lo que la arquitectura puede ser.

Su visión única y su compromiso con la innovación han transformado la manera en que concebimos y experimentamos el espacio arquitectónico. A través de su obra y su legado, Hadid no solo ha dejado una marca imborrable en la arquitectura, sino que también ha abierto caminos para futuras generaciones de diseñadores que continúan explorando las posibilidades infinitas de la forma y el espacio. En un mundo donde la arquitectura sigue evolucionando, el espíritu de Zaha Hadid perdura, desafiando a todos a imaginar y crear sin límites.

A través de su legado, Hadid inspira a nuevas generaciones de arquitectos y soñadores a explorar los límites de la creatividad y la forma. Su impacto en el mundo de la arquitectura es innegable y su visión seguirá influenciando a futuros proyectos en todo el mundo.

Centro acuático de Londres