Una de las piezas claves del mercado inmobiliario radica en la figura del agente inmobiliario. Con demasiada frecuencia se cree que la única función de un agente de la propiedad inmobiliaria es vender pisos, pero sus funciones van mucho más allá. En este artículo queremos recoger cuáles son las principales funciones del agente inmobiliario.
El agente inmobiliario actúa en tres frentes: el área comercial, el área de gestión y el área de negociación. Un buen agente inmobiliario debe dominar las tres áreas. Dominando estas tres áreas el agente inmobiliario podrá realizar las siguientes funciones:
- Atender al teléfono y dar información a todas aquellas personas que pregunten por un determinado anuncio. En dichas llamadas acostumbran a pactarse los horarios de visita a los inmuebles en venta o en alquiler.
- Buscar propiedades potenciales. El mercado inmobiliario es un mercado muy vivo, las propiedades fluyen constantemente y el agente inmobiliario debe conocer las propiedades que están potencialmente en venta para encontrar entre ellas aquélla que mejor se ajuste a los intereses y gustos de los clientes. Para ello, el agente inmobiliario debe analizar el mercado. Sin tener ese conocimiento del mercado, el agente inmobiliario no podrá asesorar al cliente sobre si el valor de la casa en venta es un valor adecuado o si una determinada compra es una buena opción. Gracias a ese conocimiento del mercado inmobiliario, el agente inmobiliario puede orientar a su cliente para hacer ofertas y contraofertas.
- Inspeccionar las propiedades. El agente inmobiliario se encarga de inspeccionar las propiedades tanto a nivel físico como a nivel registral. El objetivo de toda esta inspección es evitar que el cliente que compra una propiedad inmobiliaria pueda sentirse “estafado”. El agente inmobiliario comprueba que la vivienda esté libre de cargas y revisa todos los procesos que tienen que ver con lo que se conoce popularmente como “papeleo”. Para cumplir esta función de manera correcta, el agente inmobiliario debe conocer, por ejemplo, qué impuestos afectan a la compra-venta de viviendas, cuáles son los derechos y obligaciones que rigen en las comunidades de propietarios, qué es legal y qué no según la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) y cómo redactar un contrato de compra-venta o alquiler inmobiliario. El agente inmobiliario, pues, actúa en todo el proceso de la compra-venta o el alquiler de una propiedad inmobiliaria como un escudo para salvaguardar los intereses de vendedores y compradores. Una de las funciones del agente inmobiliario es, pues, proporcionar seguridad jurídica.
- Gestionar el marketing de las propiedades en ventas. Una propiedad inmobiliaria se venderá mucho mejor si está publicitada que si no lo está. Así, el agente inmobiliario deberá encargarse de que se realicen buenos anuncios de las propiedades en venta, de que aparezcan vídeos de la misma en la red, de que se repartan flyers anunciando las propiedades en venta que componen el catálogo de la agencia inmobiliaria en la que trabaje…
- En los últimos años ha adquirido especial importancia lo que se conoce como home staging, una serie de técnicas destinadas a mejorar la imagen de la vivienda y aumentar sus posibilidades de venta. (Si quieres saber algo más sobre en qué consiste el home staging lee nuestro artículo “El home staging o cómo revalorizar una vivienda”). Si bien el agente inmobiliario no acostumbra a ser, directamente, el encargado de realizar el home staging de una vivienda (lo acostumbran a realizar empresas especializadas, cada vez más presentes en España), sí entra dentro de sus funciones el contactar con los especialistas en home staging para ponerlos en contacto con sus clientes
- Resolver dudas sobre la financiación, sobre costes de las reformas que puede necesitar un inmueble, etc.
Como se ve, son muchas las funciones de un agente inmobiliario. Todas ellas, sin embargo, se reducen, en esencia, a una: conseguir que todo el proceso de compra-venta de una propiedad inmobiliaria sea lo más sencillo y menos estresante posible tanto para el comprador como para el vendedor de un inmueble.